El domingo 24 llegué a Göteborg, Suecia. A diferencia del agente de inmigración escocés, aquí sólo me preguntaron la duración de mi visita e inmediatamente ya tenía un sello más en el pasaporte. Tomé un camión a la estación central, donde me estaban esperando Costa y Erik. Camino a la casa nos detuvimos a comer, un platillo muy sueco, kötbullar (albóndigas) acompañadas por puré de papa y una salsa de moras ¡yay! Después, en lo que me bañaba llegaron Ele y Matt con lo que pensé sería la dotación de helado del día (inocente de mi), nos lo acabamos y nos fuimos en bicicleta a Slottsskogen, a la mitad del trayecto Ele se detuvo ahora por medio litro de nieve de pistache y otro medio sabor frutas tropicales. ¿Tengo que advertirles que aquí comen helado todo el día? Y vaya que aquí los días rinden... amanece pasadas las 3:30 y obscurece pasadas las 23:00. El lunes fue como la puesta al día (catch-up) en Vasastan. El martes salimos con las niñas (las flat-mates: Maria, Madelen y Cathleen) y Henry al Skål. El miércoles fuimos con Ali al billar y al Dancin' Dingo. El jueves fuimos al depto. de Matt y de ahí nos pasamos a un pub irlandés. El viernes fuimos con Hanna y sus amigos a Chez amies y Vasastan, luego nos descolgamos a Tranquilo. El sábado comimos goulash con Sici y Anika a orillas del canal, y de ahí nos fuimos al Stadsmuseum... todo iba perfecto hasta que se acabó la sección de los vikingos (la única con traducción al inglés). Por la tarde compramos los ingredientes para hacer una cena mexicana. Lisa y Hanna llegaron temprano para ayudarnos, preparamos arroz, pollo con mole e hicimos tortillas. Luego se nos unieron Mia, Cathleen, Jesper, Ali y la amiga
fulla de Cat... Bueno, creo que se pueden dar una idea de por qué la falta de posts. =)
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